Amig@s ¿qué podemos decir de El americano?
Pues que El americano es una película colorista: blanco nieve, gris piedra, verde árbol, azul Fiat, beige piedra, rojo burdel, amarillo farola, marrón piedra, negro traje de Armani... Y, a pesar de ser tan colorista, todo tiene un aspecto casposo y railitoide sorprendente. Es un nuevo concepto de película. Que sí, hombre, que sí.
Es una peli de grandes personajes, a saber:
- Sale George Clooney, muy intenso, muy del Actor's Studio, como con estreñimiento todo el rato, y (ATENCIÓN, SPOILER) al final se disfraza del hermano mayor de Café Quijano.
- Sale un cura italiano, que habla "desde el cura que llevo dentro".
- También sale una puta italiana de ojos azules que trabaja a turnos y no se peina.
- Sale una especie de Daniel Craig senior arrugaíto, arrugaíto.
- Y sale una mujer morena. Bueno, no, rubia. Bueno, no, pelirroja... (ATENCIÓN, SPOILER) que lleva un lápiz de labios ideal todo el rato.
El americano también es una peli de paisajes:
- Sale una carretera. Todo el rato. A la ida. A la vuelta. Por la mañana. Por la noche. Recta. Curva. Desde la derecha. Desde la izquierda. Y no es una road movie. Toda una revolución del género.
- Sale un río. Con árboles, juncos, casquillos de bala, mariposas en peligro de extinción y esas cosas. Y no es una peli costumbrista. Francamente, revolucionaria.
- Salen pueblos de montaña. De cerca. De lejos. De muy cerca. De muy lejos. Por la mañana. Por la tarde. Por la noche. Con lluvia. Mojados. Todo el rato están en pueblos. Y no es "Un país en la mochila". Ya digo, puritita revolución cinematográfica.
Gracias a El americano tenemos varios grandes momentos que no pasaran a la historia del cine (ATENCIÓN, SPOILERS):
- Cuando George se pone vizco al despertarse.
- Cuando George se va a dormir.
- Cuando George no se resbala cuando persigue descalzo a un sueco por el suelo empedrado mojado.
- Cuando George piensa. Piensa bastante.
- Cuando pasa algo en el minuto 110, o así.
Podría decir alguna cosa más de El americano pero me lo reservo para cuando tenga una cerveza delante. Y si está Sil, mejor.
Como la banda sonora de El americano es absolutamente insufrible, les dejo con el único e incomparable Renato Carosone, por si a alguien se le ocurre Fare l'americano, que lo haga con un poco de fundamento.