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| Lo del dadbod no lo habéis inventado ahora Y LO SABÉIS. |
Algún imbécil ha puesto nombre a lo que viene siendo un hombre sin una tableta de Valor en el abdomen: dadbod o fofisano. Se conoce que ahora hay que poner nombre gelipollas a todo para ahorrarse la explicación y, chica, mira, vamos a decir esa soplapollez y a ver si cuela. Y cuela. Igual un rato, pero cuela.
El caso es que alguien ha dicho que está de moda el hombre dadbod y eso que ganan los esclavos de las mancuernas, porque así pueden dejarlas si quieren, que van a estar a la moda de todas formas. O todo lo a la moda que está un hombre normal razonablemente atractivo, COMO SIEMPRE.
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| Jason, uno de mis hombres normales favoritos. |
Empiezo a pensar que esto de los dadbod es un rebote. Que ya está bien de que las únicas que tengan derecho a sentirse bien siendo como son y felices con sus cuerpos sean las mujeres, que nosotros también queremos liberarnos de las servidumbres de la moda, que queremos dejar de machacarnos en el gimnasio para tener cuerpos perfectos.
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| Ewan, molando en la playa con sus pelos y sus tatuajes. |
El caso es que da igual. La cuestión es que debería empezar a parecer evidente que lo de los estándares de belleza está muy bien y esas cosas, que ya los griegos y los romanos tenían cánones que les funcionaban bastante bien, que es inevitablablabla... pero, chica, que donde esté una persona que te gusta, independientemente de si tiene pelos en el pecho y barriga cervecera, que se quite el chocolatHUY, PERDÓN.
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| Entrenador, molas mil. |
Uy, ayer ya te dije que me encanta Earl, el del karma... y ahí me pones el afotico, como para contentarme la vista. Qué mono y qué normalico es.
ResponderEliminarToy cansada de que le pongan etiquetas a todo, ¿ahora lo moderno es estar badbod? pos bueno, pos vale, pos m'alegro.
Ya han fastidiado a las mujeres para que cambiemos nuestro físico, ahora van a por ellos. Pero no se dejan (tanto). O sea, como no se dejan, mola ser normal.
Pues a ver cuándo mola ser normala, así, en femenino. Que nosotras también queremos que nos dejen en paz las revistas de guaperío...
Un besote.
Este universo imbécil que se está creando, en que las máquinas que más trabajan son las etiquetadoras, está dando lugar a un mogollón de personas cuyo sentido de la existencia parece ser el tener que gustar a los demás, en vez de personas que se sienten satisfechas gustándose a sí mismas y con eso ya es más que suficiente.
ResponderEliminarQue si con barba, sin barba, con pelos, sin pelos, cachas o fofo, tatuado, gafapasta, hipster, metrosexual... Joder, que alguien pare de una vez toda esta tontería.
Viva la diversidad y abajo la tiranía de las modas.
Volvemos a estar de moda!
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