lunes, 29 de julio de 2013

Los gafes

El mundo está lleno de gafes, de esas personas a las que todo les sale mal, que aunque parezca que no, que es imposible, van a cagarla cada vez. Todas las veces.

Por lo general, los gafes dan penita a la gente. Hay cierta tendencia a excusarles, diciendo "ay, pobre, si es que todo le sale mal", a sentir esa lástima tonta, a prestarles ayuda porque están solitos en el mundo y no van a sobrevivir. Despiertan un paternalismo caduco y protector, que hace que nos esforcemos por intentar cambiar su suerte, por hacer que las cosas les vayan mejor, lo que se traduce en que les ponemos las cosas más fáciles para ver si no la cagan. Pero sí, lo consiguen.

Pero no lo consiguen por alguna maldición bíblica o algún rayo divino malvado que que pone al mundo en su contra, no, qué va. Suelen serlo porque toman malas decisiones, una y otra vez.

Son personas fantasiosas y egoístas, que creen que tienen tanta importancia, para bien o para mal, que no vale la pena tener en cuenta otras variables, y que no aceptan consejos o sugerencias. Están tan enfadados con el mundo que no soportan que nadie les diga, otra vez, lo que deben hacer. Y están tan ensimismados que no se dan cuenta de que lo que les lleva al desastre no es que otros les digan siempre lo que deben hacer, sino que nunca les hacen caso, por sus santos cojones.

Los gafes lo son porque se esfuerzan por serlo, ni más ni menos. Si pusieran tanto empeño en salir de cada agujero que construyen a su paso les iría mucho mejor.

Pero lo peor de los gafes es que, aún no sé muy bien por qué, te arrastran a su mierda, incluso aunque te alejes a una distancia prudencial en cuanto empieza a oler mal. Es como si, en el colmo de las paradojas, no supieran hundirse solos y necesitaran la compañía de cuantas más personas mejor para cagarla bien, con fundamento.

No acabo de entender qué coño hace la selección natural esa de mierda que aún no se ha llevado por delante a los gafes...

3 comentarios:

  1. Quiza porque todos alguna vez en mas o en menos hemos creido serlo

    ResponderEliminar
  2. Cuando pienso en gafes, me viene a la cabeza la imagen de Rompetechos, no me preguntes por qué xD

    ResponderEliminar
  3. Yo conozco a una que siempre le pasa de todo y un día me decía "jo ¡es que todo lo malo me pasa a mí!". Y yo le dije "Perdona, bonita, pero a todos nos pasan cosas malas, sólo que no lo contamos". Hay gafes de verdad y otros de mentiras, como ésta, que lo único que quiere es adoración. Postureo gafe, vamos.

    ResponderEliminar