domingo, 31 de marzo de 2013

Expediente X, la crítica definitiva


Sinopsis
Expediente X es una serie de televisión estadounidense de ciencia ficción y misterio, emitida de 1993 a 2002, que cuenta las peripecias de los agentes del FBI Fox Mulder y Dana Scully mientras buscan la verdad, que estaba ahí afuera todo el rato.


Reparto
Expediente X está protagonizada por David Duchovny en su papel de Iker Jiménez pero en guapérrimo y Gillian Anderson, en su papel de planta decorativa sin gafas que no necesita mucho riego. Salen otros a lo largo de la serie pero son meras comparsas: tres frikis locos de los ordenadores, el director Skinner, el fumador y los demás confidentes, el Krycek este de las long lashes, algunos agentes del FBI que ayudan o no según el caso... pero como no salen sus carnets al principio no me he quedado con sus nombres. Bueno, sí, sale el pirata Roberts al final, pero no lleva mallas. 

Duchovny (Mulder, ÑAM) hace de un agente del FBI con gabardina al que quieren tan poco que trabaja en un despacho cerca de los lavabos en el sótano y que está obsesionado por las cosas raras que pasan en el mundo. A Mulder igual le da que le da lo mismo un asesinato que una secta satánica que unos ovnis que unos incestos perturbadores que unas conspiraciones gubernamentales que monstruos creados artificialmente que unas abejas asesinas que ectoplasmas, él come pipas y resuelve los casos. Le disparan, le abducen, le envenenan, le matan, le poseen, le contagian, le pegan, le despiden, le riñen, le mienten, le matan, le rematan, le entierran, le reviven, le persiguen... un sinvivir. Pero él come pipas y lleva corbata.

Anderson (Scully) hace de una médica forense del FBI pelirroja de bote y MUY bajita que siempre va bien peinada y no se cree nada de nada lo paranormal pero es creyente católica. Lleva unos zapatos bastante bonitos casi toda la serie pero su vestuario deja bastante que desear, aunque sus gabardinas son un must, eso sí. Scully es muy científica, muy del empirismo, a pesar de que ve bichos que poseen a personas, personas que poseen a personas, abducciones de personas, cosas raras en personas, personas muertas que resucitan... en fin, Scully es lo que viene siendo un ni jode ni deja joder: da por culo todos los episodios con los de la ciencia pero firma los informes de los expedientes X.

Incomprensiblemente, en Expediente X aparecen otros actores y actrices además de Duchovny. Algunos nos suenan porque se han convertido en protagonistas de productos de éxito o porque han seguido siendo secundarios, lo que me lleva a pensar que lo serán toda su vida: Seth GreenFelicity HuffmanTitus WelliverZeljko IvanekShawnee SmithTerry O'QuinnTony ShalhoubGiovanni RibisiJack Black, J. T WalshRyan ReynoldsKurtwood SmithLucy LiuRubén BladesRaymond CruzLaurie HoldenJohn FinnLuke WilsonLili TaylorMimi RogersBryan CranstonLily TomlinBruce CampbellLance HenriksenWillie GarsonJoe Morton,...


Crítica
Expediente X ha envejecido mal. Muy mal. Básicamente porque ya era una mierda cuando la estrenaron y, con el tiempo, la mierda no tiende a mejorar.

Es efectista a veces pero casi todos los capítulos están mal cerrados. A ver, que ya sabemos que es todo muy misterioso y tal pero, hombre, un poquito de por favor... Y las tramas transversales son tan enrevesadas y hay tantos implicados que van y vienen del bien al mal, al regulero y al peor que es fácil perderse, sobre todo si se ve en versión original mientras se hace la faena de casa.


Cosas que salen mucho, demasiado o coño, ya está bien, lo poco gusta, lo mucho cansa.
  • Puebluchos de mala muerte con casas desvencijadas y polvo en el camino.
  • Hospitales.
  • Tramas religiosas.
  • Contraluces con ventanas.
  • Planos de coches acercándose a la cámara de noche con las luces encendidas.
  • La puta música de Mark Snow.
  • Scully.
  • Skinner.
  • Otras personas.

Cosas que no salen y se echan en falta.
  • Mulder desnudo.
  • Mulder follando.
  • Mulder en la ducha.
  • Mulder humedeciéndose los labios y haciendo así ven con el dedito.
  • Mulder tocándose mientras una bailarina de strip tease le hace un lap dance.
  • Mulder embadurnado de aceite bailando You can leave your hat on en calzoncillos.
  • El culo de Mulder.


Resumiendo, Expediente X es CACA.

domingo, 24 de marzo de 2013

A demanda

Resulta que tengo unos días de vacaciones. Y tengo muchas cosas que hacer. Y, sobre todo, tengo mucho que escribir, pero de otras cosas. Qué le vamos a hacer, cosas de la multidisciplinariedad y de ser culo de mal asiento.

Así que voy a tomarme unos días para escribir a demanda, porque no tengo ganas de pensar mucho, básicamente. Es más fácil escribir a demanda, ya lo sé ¿qué morro, no? pero, eh, es que estoy de vacaciones, ¿recuerdan?

Voy a seguir recuperando post antiguos. Hay algunos que no están mal y no me apetece perderlos. Y, bueno, si tienen alguna petición, adelante, no se corten, que igual me parece bien que ya escribo de lo que me dé la gana, vete a saber. 

Y, si no, pues oigan, no pasa nada. Seguro que le pego fuego a algo estos días y me apetece contarlo. Mira, para empezar, hoy me voy de barbacoa.

miércoles, 20 de marzo de 2013

Tu piel me hace llorar

Por las noches, cuando estás dormido, dibujo caracolas de mar sobre tu espalda con la luz que entra por la ventana. Sigo cuidadosamente los caminos de tu piel, los pliegues, las cicatrices... No me dejo ninguna, ni siquiera esa pequeñita que tienes casi en la nuca.

Voy despacito, para no salirme. Porque tú no lo sabes pero son caracolas mágicas que guardan conjuros protectores y deben ser perfectas. 

Y lo son. Son tan perfectas que si me acerco mucho se me olvida tu respiración acompasada y puedo escuchar el mar. Y suena tan vívido, tan real, que cojo aire e inspiro intensamente, muy intensamente, para sumergirme bajo las sábanas y nadar entre tus piernas.

domingo, 17 de marzo de 2013

Días falleros

8:00 a.m.
Despertá. Durante una puta hora.

Los falleros del barrio se reúnen en su sede habitual, reparten las armas en cajitas de cartón, se abrigan, se tapan la cara con un pañuelo de cuadraditos azules y se lanzan al barrio a dar por culo durante una hora a base de troncs de bac*.

 

La despertá es ETA. Los falleros son ETA. ETA es ETA. Su reputa madre.

09:30 a.m.
Desayuno fallero en el puesto callejero del barrio, compuesto por buñuelos de calabaza y chocolate caliente, servidos en vajilla de plástico.

Sigue en el ambiente el olor a pólvora, y en las aceras, paredes, contenedores y demás mobiliario urbano, las marcas de la batalla.

Manjar de dioses.

11:00 a.m.
Almuerzo fallero en terracita del barrio, compuesto por tres cervezas, un platito de kikos, cacaos, habas fritas y garbanzos de esos secos.

Incidencia: hay un desacuerdo en la planificación y decidimos debatirlo con otra cerveza.

13:00 p.m.
Viage en betro hacia la plaza del Ayuntamiento, para ber la bascletá. 

14:00 p.m.
Bmmascletá en la Plaza del Ayuntamiento. Be siento una bersona esbecial aunque esté con chorrocientas mil bersona báGUAAAAAPEEEEES! VIXCAVALENSIA!

La bascletá es un acto muy bonito. Se oye bor begafonía en el idioma aborigen "Senyor pirotècnic, pot escomençar la mascletà" (señor pirotécnico, puede comenzar la mascletá). Se conoce que el pirotècnic es muy educao y hasta gue no le da permiso una voz de mujer no empieza. BONIIIICAAAAA! GUAAAAAPEEEEEES! FALLEREEEETES!

Frío-calor difícil de sobortar, a do ser gue tengas cerveza de bote galiente.


14:10 p.m.
Gomienzzzo de la disgusión para decidir en qué parada gogemos el betro.

14:45 p.m.
Bedos bal gue hemos tardado casi una hora en decidirnos porque si no hubiéramos pillado todo el mogollJAJAJAJJAJAJJAJAJJAJAJA.

GUAAAAAAAPEEEEEES! VIXCA VALENSIA, CAGONLAMARSERENA!

15:15 p.m.
Siesta del borrego mientras se hace la sopa.

15:45 p.m.
Mamá, gué vien gue hayas hehco COCIDO, que creo gue me ha sentadp algo bal y do estoy buy fina.

16:30 p.m.
Siesta de la normal en el sofá de papás.

18:00 p.m.
Merienda fallera en casal de toda la vida de otros, compuesta por cervezas, papas, gusanitos y carajillos.

20:30 p.m.
Ssssiesta de la dormal en gasa.

23:00 p.m.
Ducha reparadora y disfraz de fallas: vaqueros, blusón fallero, coleta y ZAPATILLAS DE DEPORTE.

Verbena en casal en Ruzafa.

Brebena en gasal en Aragón.

Frevena en gasssal en Mislata.

05 y algo a.m.
Gotellón en bi gasaZZZzzzZzzZZzz

8:00 a.m.
Despertá. Durante una puta hora.


Resaca. True story.

* Tronc de bac: petardo típico de las despertás. Montoncito de pólvora envuelto en papel que explota con gran estruendo cuando impacta contra una superficie dura, como el exterior de la pared de mi habitación. Mecgoensuputamadre.

viernes, 15 de marzo de 2013

Postulando

Imaginemos que postulamos para un trabajo en una empresa de las que podemos denominar. Para conseguirlo decimos lo que sabemos hacer, lo mucho que vamos a aportar, lo bien que vamos a satisfacer las necesidades. Y si no tiene necesidades, se las creamos: "mire usté, que igual no lo sabe, pero veo que necesita cambiar la junta de la trócola y yo puedo hacerlo. No, quiero hacerlo. Y voy a hacerle el mejor cambio de junta de la trócola que le han hecho en su vida. Le va a gustar tanto que va a querer que le cambie la junta de la trócola una y otra vez". Porque esto es bueno.

No sé yo si llegaré a ver el día en el que cuando postulemos para frinkarnos a un muchacho le digamos lo que sabemos hacer, lo mucho que vamos a aportarle y, sobre todo, lo bien que vamos a satisfacer sus necesidades, las que ya tiene y las que vamos a crearle: "mire usté, que igual no lo sabe, pero veo que le vendría bien una buena mamada felación y yo puedo hacerlo. No, quiero hacerlo. Y voy a hacerle la mejor mamada felación que le han hecho en su vida. Le va a gustar tanto que va a querer que le haga una mamada felación una y otra vez, hasta que se le caiga a pedazos". Porque quedas como una zorra.

Algo estamos haciendo mal.

jueves, 14 de marzo de 2013

Juntos



Era joven y no tenía prejuicios. Sobre nada. 

Le quería y no le importaba demostrarlo, no le importaban sus amigas y no le importaba “el qué dirán”, ni estaba pendiente de si les observaban. 

Rompió con todo y no miró atrás. No esperaba que nadie le intentara convencer de que no lo hiciese y siguió su camino. Junto a él. 

Han pasado muchos años y todavía siguen unidos. A pesar de las dificultades, o quizá gracias a ellas, siguen queriéndose como el primer día. Sin nadie que les diga cómo hacerlo. 

Y todavía un escalofrío recorre su cuello cuando, a solas, piensa en su vida pasada, en sus abrazos, en su voz. En su vida futura. 

Juntos.


Isi H.

martes, 12 de marzo de 2013

De lo nuevo que en realidad es viejo

Hola, soy Sil. Gordi y yo nos hemos intercambiado los blogses por este día porque la amistad y la confianza tienen esas cosas. Pero eh, un momento, ¡no se vayan! Denme una oportunidad, che. Que ya sé que ella cuenta las cosas mucho más mejor, pero igual ¡hasta les gusto! ¡Un poquitito! ¿No? En fin, voy a intentarlo… 



Hace poco vi una película llamada “El atlas de las nubes”. No voy a entrar en detalles, sólo diré que tiene seis historias, cada una de ellas ambientada en una época distinta: 1849, 1936, 1973, 2012, 2144 y 2321. Os la recomiendo, es una película de ciencia-ficción interesante.

Es curiosa la ciencia-ficción. Las películas de hace cuarenta años vaticinaban que a estas alturas de la historia todos conduciríamos coches voladores vistiendo trajes plateados. Ignoro qué deparará realmente el futuro: tal vez las actuales ciudades estén semienterradas de aquí a dos siglos y en su lugar haya otras con edificios sustentados por paredes táctiles. El caso es que la película me hizo pensar sobre la posible evolución del mundo, rollos apocalípticos aparte, y al volver a la realidad me alegré de algunas cosas.

Por ejemplo, del efecto pendular de las modas: el otro día, un colega subió a su Facebook una foto de su nuevo teléfono. Cuando todos esperábamos esto:
Lo que vimos realmente fue esto:

  

Dejando a un margen lo poco práctico que es un teléfono de este tipo frente a la multifuncionalidad del otro cacharrito, me resultó esperanzador que alguien mirara al pasado una vez y rescatara una cosa que siempre tuvo su encanto, al menos para mí. El sistema de la ruedecilla me entusiasmaba, me pasé media infancia simulando llamar a gente sólo por darle a la ruedecilla. No sé si un psicólogo tendría una explicación a eso, pero así era. En cualquier caso, me pareció maravilloso que entrados en 2013 un colega instalara en su casa un teléfono de cuando todavía no había nacido.

Siempre soñé tener uno como éste…


Cuando empezó a editarse música en formato digital, desaparecieron los LP de las tiendas, ¿os acordáis? Pero luego volvieron. Porque en el fondo, la escucha de un buen disco implica varias cosas: 
  1. El ritual de sacar el disco, pasarle la esponjilla, soplar con mimo las motas de polvo, colocarlo en el giraplatos, limpiar la aguja y posarla a cámara lenta sobre la superficie del disco; 
  2. Escucharlo de principio a fin, sin saltar el orden de las canciones y sin repetir en plan bucle la que más nos gusta, y 
  3. La crepitación que produce el roce de la aguja sobre el vinilo, de fondo durante la música, y absoluta protagonista entre canción y canción. Ningún sistema digital con dolby surround estará nunca jamás a la altura de eso. 

Qué decir de las gafas de sol modelo Wayfarer o Aviator (tan de moda en los cincuenta y en pleno auge otra vez), las sneakers (calzado deportivo ochentero por excelencia), los seiscientos/minis/escarabajos restaurados que se dejan ver por ahí de vez en cuando, los hogares que combinan las últimas tecnologías con el encanto de los muebles antiguos con una manita de pintura o el éxito de las ferias o mercadillos de libros cosidos con hilo y de tapa dura forrada en tela. 

¿Realmente habrá un momento en que todo eso dejará de existir? ¿Alguien de las futuras generaciones hará ganchillo? ¿Seguirán yendo al mercado a comprar los productos frescos o será todo 100% precocinado? De aquí a cien años, ¿alguien sentirá el placer de escribir a mano con una buena estilográfica?

Mientras me entran tentaciones de volver a escribir esto con la Olivetti de mi madre, deseo que nada se pierda para siempre. Incluso aquello que, aparentemente, ya no sirva. Nunca se sabe…

viernes, 8 de marzo de 2013

La mala suerte

La suerte.

Joder, vaya concepto de mierda.
Suerte.
(Del. lat. sors, sortis).
1. Encadenamiento de los sucesos, considerado como fortuito o casual.
2. Circunstancia de ser, por mera casualidad, favorable o adverso a alguein o algo lo que ocurre o sucede.

La suerte.

No me gusta nada lo de la suerte, ni la mala ni la buena. Precisamente por lo de la casualidad. No me parece justo. No me parece bien, conceptualmente, que la casualidad, que algo fortuito, tenga tanto poder, todo el poder.

Porque al final es eso: si uno tiene suerte, de la buena, puede tenerlo todo. Si no, caca.

Hay por ahí frases de esas autoayudantes que dicen cosas como la suerte se la construye cada uno y todo eso. Y probablemente tengan razón. A veces, sólo a veces, uno crea su destino, crea su suerte. Pero, ¿qué pasa con esos que no saben que tienen que constuirse una suerte además de una carrera profesional, una familia, una red de relaciones sociales, un patrimonio, una salud, un refugio para el futuro...? ¿Qué pasa con esos pobres diablos que no tienen la habilidad o la capacidad suficiente para construir nada, y menos una suerte?

Esos son los parias de la tierra, los perdedores, los garbanzos negros.

Son el lastre.

Porque su mala suerte, forjada tras infinitos encadenamientos casuales, a cual más desenfocado, son un peso en la mochila para los demás. Porque uno que tiene mala suerte y no sabe que tiene que construir la buena necesita siempre a otros para salir de la mierda. Porque provocan una tristeza y una desazón constantes. 

Son el lastre.

Y lo peor es que no suelen tener mala intención, ni malos pensamientos. Sólo tienen mala suerte.

miércoles, 6 de marzo de 2013

Crisisdequetecagas

Cuando una vive sola su casa es su castillo. En mi caso, tengo un control absoluto sobre suministros y consumibles. De manera natural. Teniendo en cuenta todas las variables, sé exactamente para cuántos días me queda champú, pasta de dientes, cerveza, leche o Colacao. Otra cosa es que me acuerde de comprar y tenga que robarlo del trabajo o de casa de mis padres pero, eh, sé cuándo va a acabarse. Control absoluto. 

Yo vivo estructuralmente sola y estoy coyunturalmente acompañada durante la semana. Tiene ventajas, claro: no hay discusiones tontas, no hay enfados por las pequeñas cosas diarias, no hay malos rollos, hay mucho sexo y muy bueno... Es perfecto. Bueno, no, es una mierda pero tiene cosas buenas. Y debería ser perfecto, pero no lo es porque dejo de tener control absoluto. Y esto provoca crisis. Grandes crisis. CRISIS DEQUETECAGAS.

Y la culpa la tienen los rollos de papel higiénico de Scottex.

Podríamos decir que los rollos de papel higiénico de Scottex son mi némesis, mi archienemigo mortal.

Duran menos. En serio, es un hecho: duran menos que los del mercaseñora. Y eso es un problema porque una piensa que tiene suficiente para llegar al día siguiente con dignidad. Justito pero con dignidad. Mira el rollo de papel higiénico recelosa, se debate entre hacer una visita de urgencia al badulaque, por si acaso,. Una remira el rollo de papel higiénico y lo ve lozano, mullidito, prometedor... una no recuerda que es un rollo de Scottex* porque no lo pone en ningún jodido sitio en granded y con colores y decide que tiene suficiente hasta el día siguiente. Es más: hay para dos días, qué coño.

Y no. Porque es un rollo de papel higiénico de Scottex, su némesis, su archienemigo mortal.

Con este recuerdo aparentemente banal en lo más recóndito de su celebro, una va haciendo cosas mientras mira la vida pasar.

Y entonce aparece la compañía coyuntural y lo primero que hace es ir al váter.

Y luego se suena los mocos.

Y luego vuelve a ir al váter. Que una piensa, ya medio constreñida "no sabia yo que este chiquito tenía el tránsito intestinal tan suelto, pobre".

Y, de vez en cuando, una mira el rollo de papel higiénico y así, como quien no quiere la cosa, saca un paquete de pañuelos, lo deja sutilmente encima de la mesa y dice "aquí tienes pañuelos de papel, cari, no hace falta** que uses papel del váter".

Y él vuelve a sonarse los mocos con papel del váter.

Y así hasta el momento de terror que tanto temíamos, amigos:

Nena, se ha acabado el papel. ¿Dónde lo guardas?

Crisis.

- Pues no hay, fíjate. Quedaba poco y te lo has sonado todo, joder, que hace una hora que te he dejado un paquete de pañuelos de papel encima de la mesa y no has dejado de hacer viajes al váter, coño, qué manera de cagar y de tener mocos...

- Eh, no te pongas así, que no pasa nada, usamos servilletas de papel.

- Pues ya me contarás qué gracia.

- Si quedaba poco, ¿cómo es que no has comprado más?

- Porque no tenía ganas de volver a vestirme porque hace frío, no te esperaba y, la verdad, pensaba que tenía suficiente. Estaba gordito hasta que has llegado. ¡GORDITO!

- Ah, que es Scottex.

Bien. Igual hemos exagerado. Tampoco fue una crisis tan grande.


* Hola, señor Scottex.
**  No hace falta. ¡NO HACE FALTA!

viernes, 1 de marzo de 2013

De los preguntones

Hay dos tipos de personas: las que buscan en Google cuando quieren saber algo y las que preguntan a otro para que busque, se lo resuma y se lo cuente. 

Hace unos días recibí un correo de un amigo a las 9:43 de la mañana:
Amigo Hola Gordipé, ¿recuerdas lo del blog? Pues estoy mirando en blogger, pero no te ofrece la posibilidad de poner muchas cosas, por ejemplo, no puedo poner botonera tipo ¿Quién soy? y poner unas líneas y debajo el cuerpo del post... ¿cómo has montado el tuyo? Gracias ;*
Gordipé Hola. Sí se puede. Tienes que añadir una página a la plantilla. Utiliza una página para (blablabla...), y otras páginas para poner el ¿Quién soy?, Te recomiendo que (blablabla...). Mira, lo mejor es que busques un tutorial o algún post sobre cómo crear blogs en Google, y lo miramos esta noche.
Amigo No lo encuentro.
Gordipé No me lo creo. Ahora no puedo pararme a explicarte cómo hacer un blog. Busca un tutorial en Google y prueba cosas, familiarízate con la herramientas antes de hacer algo definitivo. Hablamos luego.
Amigo ya he creado el blog pero he hecho algo mal y ahora no me deja poner el título que quiero, sabes qué puede pasar?
Gordipé Pues desde aquí, no. Sin saber qué has hecho ni cómo lo has dejado, no. Pueden pasar muchas cosas. Ahora no tengo tiempo de mirarlo. Si tienes dudas busca tutoriales en Google y lee post para aprender más cosas.
Amigo Gordipé, para insertar un archivo pdf al post, hay alguna manera?
Gordipé No.
Amigo pues vaya cómo se crea una url?
Gordipé ¿Has hecho la búsqueda en Google? Cualquier cosa que se te ocurra buscar ya la han buscado y solucionado otros. ¿Has entendido que no puedo dedicarme ahora a esto?
Amigo pero es muy difícil???
Gordipé Pues depende, ¿cuánto crees que me costaría a mí aprender a tocar Smooth on the water al piano como tú si me lo explicas por aquí?
Amigo joder, que diíta tenemos...
Amigo es un tío estupendo. En serio. Algo lers con las cosas de los ordenadores pero estupendo. El pobre pagó en un momento el mal rollo del día pero, sobre todo, pagó las miles de preguntas del becario cuando no sabe qué significa una palabra mientras lee un periódico digital; de mi padre, cuando no encuentra un correo porque no recuerda dónde lo ha guardado; de mis amigas, cuando les aparece un filete en un word que no pueden quitar; de la hijaputa; cuando no puede enviar un archivo de 10 megas... 

Ya digo, es buen chaval pero preguntó en el momento equivocado. O preguntó, simplemente. Porque la cuestión es que a veces siento que soy la única que sabe que existe Google como primera, segunda, tercera y enésima opción antes de dar por culo al personal. 

No me entiendan mal. Me gusta explicar cosas. Me gusta explicar cómo funcionan las cosas, el por qué de las cosas. No es que sea especialmente lista ni nada de eso, pero soy de las que intentan saber cosas.

Mira, igual es cosa de bordería, pero es que no puedo con la falta de ganas de aprender cosas. Ni con la gente para la que resulta más fácil preguntar a otro a ver si le soluciona fácil el problema que intentar buscar una solución por sí misma. No puedo.

Y luego la rubia soy yo.